La competidora de nado sincronizado Anita Álvarez tuvo que ser rescatada por su entrenadora, luego de que se desmayara en plena competencia durante el Mundial de Natación de Budapest.
Fue durante la final libre que se llevó a cabo este jueves, cuando su entrenadora, la española Andrea Fuentes, saltó de improviso a la alberca para sacar a Álvarez que se encontraba inconsciente a 2.7 metros de profundidad.
“En ese momento no pensé, simplemente me dije tienes que llegar lo más rápido que puedas, sacarla a la superficie y hacer que respire”, declaró Fuentes a EFE.
La española decidió intervenir debido a que los socorristas no actuaron a tiempo, debido a que se encontraban “paralizados”.
Una vez fuera del agua, Fuentes junto con el equipo médico, intentaron despertar a la competidora, a la que finalmente tuvieron que aplicar una maniobra para inducirle un shot de adrenalina.
“Intenté despertarla de todas las maneras, con gritos, bofetadas y luego ya con el equipo médico le hicimos una maniobra que consiste en apretar muy fuerte la uña del dedo pequeño, porque es un punto que activa la adrenalina y así se despertó de golpe y empezó a gritar: ¡Me estás haciendo daño! Entonces pensé: ‘Vale, ya está'”, contó a EFE.
Desde el año pasado, la deportista ha sufrido de pequeños desmayos, aunque es la primera vez que le sucede durante una competición. No obstante, se anunció que la seleccionada por el equipo de Estados Unidos se encuentra estable, por lo que aún podría competir en la final que se llevará a cabo mañana 24 de junio.