El grupo de Autodefensas Pueblos Unidos, de cuyas filas fueron detenidos este pasado sábado 167 elementos, es un organismo que navega entre la línea delgada de la criminalidad y la defensa de la delincuencia organizada en Ario de Rosales, Salvador Escalante, Nuevo Urecho y Taretán, cuatro municipios michoacanos.
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Pero su existencia, relativamente nueva, ya había llamado la atención de la autoridad, al grado de que el gobierno estatal les había hecho advertencias, desde junio de 2022, para desarmarse, por considerarse una violación a la Ley Federal de Armas y Fuegos Explosivos.
En ese momento, Israel Patrón Reyes, entonces titular de la Secretaría de Seguridad Pública, declaró que serían desarmado por considerar que ese grupo de civiles “podría estar coludido con el crimen organizado”.
El 14 de junio del año pasado, se advirtió el surgimiento de ese organismo llamado Pueblos Unidos, que a través de videos en internet explicaba las razones de su formación.
Aseguraron que por mucho tiempo permitieron la extorsión, al pagar entre cinco y 10 mil pesos a los grupos delincuenciales, una o dos veces al mes.
No obstante, se rebelaron cuando los montos aumentaron en hasta 50 mil pesos por hectárea, principalmente presionados por Los Viagra, grupo que después se sumó al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
También reclamaban que los delincuentes se estaban robando de dos a cinco camiones diarios, con al menos 10 toneladas del fruto cada uno, de los caminos que comunican del municipio de Ario de Rosales a Salvador Escalante y Taretán
El nuevo grupo de civiles recibió el apoyo de los empresarios aguacateros ya que, según sus propias declaraciones, las autoridades de Michoacán no se pronunciaban sobre la violencia desatada por los cárteles.
Argumentaron que la mayoría de los trabajadores agrícolas de la zona siempre se enfrentaban a los secuestros, levantones, ejecuciones y enfrentamientos por parte de lo que quedaba de Los caballeros Templarios.
En Michoacán es donde esos grupos de autodefensas se han consolidado y sobran ejemplos como el de Aguililla, un grupo de civiles que se asegura según las autoridades federales tiene vínculos con Cárteles Unidos y su objetivo es replegar al grupo criminal rival, el CJNG.
Anteriormente, en 2014, se formó el Consejo Nacional de Autodefensas que representaba el fallecido doctor José Manuel Mireles, cuando él y otros pobladores se levantaron en armas para luchar contra los grupos criminales locales, en especial lo que quedaba de Los Caballeros Templarios.
No obstante, a Pueblos Unidos se le ha considerado frecuentemente como un grupo criminal.
En mayo pasado, en conferencia de prensa, el mandatario morenista de esa entidad, Alfredo Ramírez Bedolla, se refirió al grupo armado como “un grupo delictivo fuera de la ley ligado a otros grupos criminales”.
Dijo que Pueblos Unidos es considerado una extensión de Cárteles Unidos de Michoacán que encabeza el llamado Abuelo Farías, exautodefensa, y líder del grupo delictivo de Tepalcatepec.
No obstante, los detenidos este fin de semana eran parte de un pequeño ejército que rebasa los dos mil elementos que se agrupan 54 barricadas distribuidas en los cuatro municipios: Taretán, Ario de Rosales, Nuevo Urecho y Salvador Escalante.